5 razones por las que salir con un chico totalmente diferente a ti es una experiencia única
Los opuestos se pueden atraer, pero cuando uno está en busca del amor, tiende a buscar personas con las que tiene algo en común. La mayoría de las personas sale con personas con ideas afines a las suyas. Incluso los sitios de citas en línea siguen un algoritmo de búsqueda de intereses entre las personas, para conseguir relaciones.
Sin embargo, el amor puede ocurrir en cualquier lugar y entre personas tan diferentes como el yeso y el queso. He aquí por qué podrías experimentar la aventura de tu vida si sales con alguien que es totalmente diferente a ti.
#5 Descubres nuevos intereses
Podrísa estar saliendo con un nerd que ama la ciencia ficción o alguien que es fan de Harry Potter. Sea lo que sea, aprendes demasiado sobre todo un nuevo mundo al que nunca habías tenido acceso. Salir con alguien con intereses distintos a los tuyos, ayuda a ampliar tus conocimientos y horizontes.
#4 Desarrollas capacidad de adaptación
Si siempre has salido con personas similares a ti, caes en un ciclo monótono de siempre hacer las cosas de la misma manera. A veces esto hace que seas menos receptiva, y cierras tu mente a nuevas experiencias e ideas. Sal con alguien que es radicalmente diferente a ti, aprenderás a ajustarte, adaptarte y ser más flexible.
#3 La química aumenta
Hay una razón por la que los opuestos se atraen. La naturaleza hace que las personas de diferentes características se atraigan entre sí, con el fin de garantizar la máxima diversidad y rasgos en la descendencia. Lo que significa que cuanto más diferente sean tu y tú pareja mayor es la química y mejor es la pasión entre los dos. ¡Es ciencia!
#2 Tus hijos tendrán lo mejor de dos mundos
Tener padres disímiles significa que los hijos tendrán dobles perspectivas sobre todo, y tendrán la oportunidad de aprender una serie de cosas diferentes de su mamá y papá. También tendrán el beneficio de ambos sobre sus rasgos, talentos e intelecto combinado. ¿Podría ser mejor?
#1 Nunca hay peleas por las mismas cosas
Si te gusta la pizza y a tu pareja le encanta el helado, nunca tendrán que compartir la última rebanada o preocuparse de que él se terminó la última bola de helado. Tú no quieres el helado y él no quiere tu pizza. Es un ganar-ganar.