Mentira. Ambos somos terrícolas y, si nos fijamos bien, podríamos estar más cerca de lo que pensamos.
Debido a esto, te invito a que bajes tu telescopio, ajustes tu visión periférica y mires a tu alrededor. Te desafío a que escuches lo que un hombre tiene para decir. Porque no estoy especulando sobre lo que un hombre piensa; estoy revelando lo que un hombre piensa.
De todas formas, antes de seguir, debemos definir un par de cosas:
Un introvertido no es alguien tímido (no, necesariamente). Un introvertido es alguien que pierde muchísima energía al interactuar con otras personas, necesitando soledad, y contacto con uno mismo, para recargar sus baterías.
Muchos de nosotros, disfrutamos a pleno de nuestra vida social. Tenemos amigos, salimos, nos exponemos públicamente y/o participamos en actividades de alta interacción social. No obstante, nuestra necesidad ulterior es la de encontrarnos nuevamente (con nosotros) y, en algunos casos, con la persona a la que le abrimos la puerta de nuestro complejo ser...
Si estás dispuesta (te advierto que no es fácil), te reto a descubrir 5 razones por las que necesitas a un introvertido en tu vida.
#1 Nuestro misterio te envuelve

Por años, hemos construido un rico mundo interior, lleno de interesantes e inesperados secretos. Puede que un día descubras que tocábamos varios instrumentos, quizá justo el día de tu cumpleaños, cuando te regalamos una versión de tu canción favorita. O puede ser que, en nuestro silencio, estemos engañándote mientras creamos una sorpresa que jamás olvidarás. No escatimamos, no procrastinamos… planeamos y ejecutamos, todo, sin que te des cuenta.
#2 Nuestra honestidad te delata
No estamos en silencio porque nos aburres, te estamos escuchando. Sí, y tenemos una opinión de lo que te sucede. No estamos esperando a que termines tu discurso, para prender la consola y comenzar a jugar, realmente nos interesa lo que te sucede; y si así no fuera, te lo diríamos. Porque hemos indagado en nuestro interior por décadas, y sabemos que no hay nada más lejano al amor que la mentira.
Si te miramos, es porque te deseamos; si te decimos “te quiero”, es porque lo sentimos; y si no estamos de acuerdo, te lo diremos, confiaremos en tu comprensión… siempre.
#3 Nuestra perspectiva te define
No necesitas de nosotros. Eres completa, tal y como estás. No debes buscar nuestra aprobación, ya nos has enamorado. Los estereotipos de los medios, son mentiras del sistema; queremos tu cabello mojado después de una ducha, y preparar una taza de té mientras peleamos en la cocina.
#4 Nuestra decisión te desafía
Somos rebeldes. No nos gusta lo mainstream, no deseamos el producto popular. No vestimos los calcos publicitarios, creamos nuestro propio estilo y, casi sin querer, imponemos nuestra “moda”. Que no te extrañe que al pasear por la ciudad, conozcamos los mejores restaurantes, o incluso a los chefs; que vayamos a un concierto y terminemos en primera fila... Te repito, no somos anti-sociales, es más, puede que tengamos muchos más contactos que el resto, simplemente, necesitamos menos tiempo de interacción.
#5 Nuestra intensidad te mueve (silenciosamente)
Observamos cada detalle... Es nuestro desafío personal conocer todos tus secretos, tus gustos y manías. Llegar a lo más profundo, buscar en lo más escondido. Aunque siempre, manteniendo los espacios… No olvides lo fundamental: ¡somos introvertidos! Necesitamos del silencio y de la creación. Habrán días que quizá pienses que no estamos, pero no es cierto, aún en el silencio diremos presente.
Somos intensos, en todo lo que hacemos. Y aunque no perdemos el sentido del humor, siempre somos serios con lo que queremos. En este caso, a ti.
¿Te atreves?