¡Qué difícil es esa etapa por la que atraviesan nuestros pequeños en la que no desean compartir sus tan preciadas posesiones! Desean con todo su corazón invitar a su mejor amiguito del jardín de infantes a jugar en su cuarto, pero cuando su tan querido amigo decide tomar ese camión, reluciente a más no poder, para hacerlo rodar por calles imaginarias, la batalla campal se desata porque "es mío, mío, mío", y con suerte, quedará el volante luego de los tirones y más tirones.
Es natural que los niños entre los dos y los tres años no deseen compartir sus cosas, aunque una vez más los padres tengamos que estimularlos para que empiecen a dominar el arte de compartir. Por eso, compartimos tips para que puedas empezar a enseñar a compartir a tu pequeño.
Antes que nada, el ejemplo
Siempre reiteramos en EntrePadres la importancia de educar a nuestros hijos desde el ejemplo, que ellos puedan ver en nuestras acciones y nuestro modo de comportarnos en la vida cotidiana, nuestros dichos y palabras. Si tienes algo que tu pequeño disfruta usándolo, en mi caso, por ejemplo, el MP3, compártelo con él. Si te han regalado un chocolate, ese por el que te olvidas de la dieta, guárdalo para poder compartirlo con tu pequeño.
Compartiendo los juguetes -y las rabietas- con los amigos
Es una tarde espléndida y tu pequeño te pide permiso para invitar a ese vecinito con el que se lleva tan bien para jugar. Tú accedes y los primeros momentos transcurren sin ningún sobresalto. Pero de repente ocurre lo que tanto temías, los pequeños comienzan a pelear por la posesión de los juguetes y tú deberás convertirte en un Juez de Paz, de buenas a primeras.
Para que las visitas de los amigos no se conviertan en una pesadilla, es bueno marcarles algunas pautas a nuestros pequeños, y antes de que los amiguitos lleguen, recordarles la importancia de compartir y de lo bien que se sienten cuando son ellos los que visitan a su amigo y él le comparte sus juguetes. La prevención también es un punto importante a tener en cuenta; si sabes que uno de los juguetes es el predilecto de tu hijo, y preferiría quedarse sin helado de postre antes que prestarlo, antes de que llegue la visita, guárdalo en un lugar seguro y explícale a tu pequeño que todos los demás juguetes son para compartir.
No sólo los juguetes deben compartirse, también nuestros hijos deben aprender a ceder sus preferencias en beneficio de las de los otros niños. Es bueno que sepa que durante un rato podrán jugar a su juego preferido, pero después será el turno del amigo decidir a qué pueden jugar.
Y lo más importante, siempre que tu niño haya compartido sus juguetes con sus amigos, valora su actitud, alabándolo, para que el "mío, mío, mío", pase a ser "nuestro, nuestro, nuestro".
¿Cómo le has enseñado a tus hijos a compartir?