¿Cuándo comenzar a alimentar a los bebés con sólidos?
No hay duda posible: el mejor alimento para los recién nacidos es la leche materna y, en caso de que haya intolerancia, la fórmula. Por tanto, no deben ser alimentados con sólidos hasta después de los 6 meses. Sin embargo, es natural que nos preguntemos cuándo exactamente el organismo del bebé puede asimilar alimentos tan nutritivos para la salud humana como los cereales y las verduras.
Síntomas de que un bebé está listo
Después de los 4 meses, especialmente llegando a los 6, los bebés empiezan a mostrar signos de que ya pueden aceptar algunos alimentos sólidos. Observarás que tu hijo está más conciente de su entorno, que desea tus comidas; también pone objetos en su boca, mira fijamente mientras comes y muchas veces se queda con hambre después de ser alimentado.
Primer alimento sólido
Precisamente entonces el mejor alimento para comenzar el nuevo hábito alimenticio es un cereal de arroz fortificado con hierro. Este mineral es muy beneficioso en esta edad y el arroz es un tipo de grano con una baja probabilidad de producir reacciones alérgicas.
Debes comenzar con cantidades muy pequeñas. Recuerda que es el momento de ir probando si ya el estómago del bebé puede asimilar algo sólido. Es suficiente suministrarle un solo bocado las primeras veces. Luego podrás aumentar la dosis a dos cucharadas si ves que todo marcha bien.

Frutas y vegetales
Una vez el cereal se haya incorporado a la dieta habitual del bebé (combinado con la leche materna o la fórmula) se puede comenzar el mismo proceso pero con purés de vegetales y frutas. Se debe dar una semana entre cada alimento, lo que permite asegurarse de que se asimilan sin ningún problema. Dale al pequeño alimentos nuevos para el desayuno o el almuerzo, no para la cena. Ello evita que se produzca un accidente en horarios de sueño.
Los purés con carne no se deben suministrar hasta después de los 7 u 8 meses de edad. Los niveles proteicos de este nutriente son muy elevados, aún imposibles de digerir por estómagos tan jóvenes.
Y muy importante: todo alimento que le des a tu bebé en estas primeras etapas debe tener una consistencia semilíquida, es lo mejor para su sistema digestivo. Con el paso del tiempo, el organismo se irá fortaleciendo y podrás aumentar la textura y consistencia cada vez más.