Luego de haber transitado varios meses durante el período de embarazo y cuando se va acercando la hora del parto nos preguntamos cómo será el nuestro: si será cesárea o parto natural. En realidad, es el médico quien analizará nuestro estado y si no encuentra ninguna complicación aprobara el parto natural o, si es indispensable, se optará por un procedimiento de cesárea.
Parto natural
Es la manera preferida de las mamás de tener un bebé, por más que signifique sufrir un poco, hacer mucha fuerza y padecer dolor se disfruta el hecho de que nuestro bebé pueda llegar al mundo de la manera más natural y sana posible. Sin embargo, esto no significa que la cesárea no sea sana sino que es un procedimiento quirúrgico que se utiliza de emergencia.
Cesárea
En muchos casos el trabajo de parto comienza de una manera normal y natural pero al momento del parto pueden surgir algunos problemas que hagan interrumpir el parto natural para realizar una cesárea, estos son: separación de la placenta del cuello uterino en donde el niño puede asfixiarse y la madre puede comenzar con una hemorragia; complicación del bebé con el cordón (se puede atascar) en donde la única manera de salvarlo es con una cesárea; dificultad del bebé para salir del canal uterino (esto sucede cuando el niño tiene el abdomen más grande que la cabeza, cosa que sucede como consecuencia de tener una mamá diabética).

Estas son algunas de las condiciones que necesitan de una cesárea para lograr un parto saludable. De todos modos, no es algo que se pueda elegir, por lo general, si no que es algo que lo decide el médico obstetra luego de analizar todos los factores que están incidiendo.