El arrayán es un árbol de poca altura cuyo nombre científico es blepharocalyx tweediel y que debido a su tamaño muchas veces es confundido como un arbusto; como características principales que se puede notar a un tronco de un pequeño grosor que dispone una corteza muy dura además de agrietada.
Debido a la forma que tienen sus hojas, el arrayán es muy fácil de identificar, pues éstas se presentan en forma de punta de lanza con determinadas directrices lineales, mismas que pueden tener entre 3 y 8 centímetros de largo y asimismo un pequeño espesor de 4 milímetros como máximo. Otra de las características que tiene el arrayán es en cuanto a las flores que éste dispone, las cuales se muestran de color blanco en pedúnculos axilares trifloros y significativamente más cortos que las hojas.
A nivel mundial es una de las plantas más conocidas que se pueden encontrar en diferentes parajes, siendo también de predilección de muchos de los habitantes en determinados poblados debido al uso casero y medicinal que se le suele dar a esta planta de arrayán.
El nombre de Arrayán viene dado por los españoles que hallaron a esta planta, misma que tiene mucha semejanza con el mirto ( Myrtus communis ), siendo este último muy popular en México. Existen algunas personas que suelen utilizar a las flores de esta planta como motivo decorativo a manera de ramo, pues dichas flores se muestran únicas y hermosas en cualquier época del año.
Para aquellas personas que pueden estar sufriendo de insomnio, el Arrayán viene a ser una solución a su falta de sueño, lo cual se aplica de una manera muy sencilla y que no requiere ninguna preparación especial, pues lo único que hay que hacer es coger unas cuantas ramitas de esta planta y colocarlas debajo de la almohada para poder conciliar el sueño; algunas personas recomiendan colocar estas ramitas entre la almohada y la funda de la misma, con el fin de que el aroma que despide esta planta sea un poco discreto. Este es un método inofensivo que viene a actuar a manera de sedante natural en contra del insomnio.
Otras cuantas personas suelen colocar unas cuantas hojas del Arrayán en los baúles o armarios, esto con el fin de preservar libros o vestidos del ataque de la polilla.