Cada vez más y más personas está cansadas de convivir con el estrés y buscan desesperadamente cómo relajar la mente para tener paz y equilibrio en sus vidas. Si tienes la suerte de no sufrir el estrés, igualmente es muy conveniente que aprendas a relajar la mente. Puede servirte mucho si en algún momento tienes que pasar por un momento difícil o angustiante.
La única forma de reencontrar la paz y el equilibrio en nuestras vidas es conectarse con nuestra existencia. Dentro de nuestra mente está todo, si lo que quieres es paz y felicidad tienes que aprender a encontrar eso dentro tuyo, pero antes que nada hay que aprender a relajar la mente para poder llegar a gozar de su funcionamiento en plenitud.
La relajación es nuestro estado natural y favorece la salud tanto mental como física. Aumenta las defensas gracias a que se fortalece el sistema inmunológico, digestivo y respiratorio. Además es una ventaja para la calidad de vida ya que se mejora la relación con uno mismo y con los demás.
El primer paso para relajar la mente es la respiración. La idea es llegar a ser conscientes de la respiración, entrando en una respiración profunda y sintiendo cada movimiento del aire dentro de los pulmones. Si logras tener total conciencia de tu respiración, ya puedes empezar a concentrarte en tu cuerpo. En cada músculo, cada tejido y zona de tu cuerpo. No sólo la parte externa, sino también los órganos internos.
Entonces lo que se hace es dedicar toda la atención de la mente a una parte de tu cuerpo específica. Generalmente se comienza por los ojos hasta llegar a los dedos de los pies.
Navega por cada rincón de tu cuerpo y con el poder de tu mente busca y elimina cualquier tensión que pudieras encontrar. Cuando estamos en este estado de relajación, las tensiones se manifestarán en forma de pequeñas vibraciones, pulsaciones o latidos. Para eliminarlas centramos nuestra mente en ese lugar hasta que desaparezca.