Le has mentido a tu pareja. Les has jugado una broma pesada a un amigo. No has cumplido con lo que tus padres esperaban de ti... En el momento no te pareció tan grave, pero a medida que pasan los días no puedes evitar el peso de la culpa.
Qué feo es sentirnos culpables ¿no? Sin dudas, la culpa es un sentimiento que puede perturbar duramente nuestra salud emocional, al punto de que no nos permita dormir a la noche. Aprende estos sencillos tips para saber cómo lidiar con la culpa y resolver el problema.
Habla sobre el tema. Contacta a un familiar, amigo o persona de confianza y cuéntale tu situación: desahógate hasta donde creas necesario. Será una manera de sentirte más liberado y mejor. Además, te podrá dar consejos útiles para que puedas solucionar el problema. Recuerda que sentirte culpable por algo y encima guardarlo en secreto puede ser una tortura para ti. Por más que te avergüence lo que has hecho, háblalo.
Pide perdón. Si realmente te lamentas por ello, la mejor manera es pedir perdón a quien corresponda, aunque te cueste. Es lo justo y lo correcto, además de que será valorado por la otra persona porque demuestras interés en ella y en su relación. Otra cosa que puede pasar es darte cuenta que, en realidad, no era tan grave como pensabas y, al hablar con la otra persona involucrada, comprobar que te estabas sintiendo culpable sin razón.
Perdónate a ti. Los seres humanos no somos perfectos: tenemos nuestros errores, y de ellos aprendemos. A todos nos puede ocurrir.
Haz ejercicio. Este consejo nunca puede faltar en