Estas dos enfermedades, la bulimia y la anorexia, que afectan principalmente a mujeres, siguen siendo amenazadoras en la actualidad a pesar de las campañas para concientizar a la población que se han dado en los últimos años.
Generalmente las adolescentes son presas de estos males, a partir de los modelos de cuerpos que se ven en la televisión y en las revistas, pero también se ven afectadas mujeres mayores e incluso hombres. Es que nadie está a salvo del deseo de tener un cuerpo perfecto, aunque ese deseo en verdad sea el de tener un cuerpo imposible e irreal.
Las mujeres anoréxicas se caracterizan por no ingerir alimentos durante una cantidad de horas, y su dieta se basa en hojas de lechuga y agua. Son muy poco sociables, ya que están permanentemente con falta de energía para disfrutar de actividades con otras personas. Además están pensando en la dieta durante todo el día, eso les impide hablar de otros temas y tener una vida normal. En apariencia son extremadamente flacas, demacradas y ojerosas, algo muy alejado a ser bellas.
Por otro lado, las mujeres bulímicas se caracterizan por darse atracones de comida en forma exagerada y luego provocarse el vomito cuando se arrepienten de lo que hicieron. En apariencia no son tan flacas como las mujeres que sufren de anorexia, por eso esta enfermedad es menos evidente. Aunque los médicos se dan cuenta por tener corroídos los dientes e irritada la garganta a causa del vomito, entre otras cosas como la falta de nutrientes y vitaminas por supuesto.
Estas enfermedades además de producir un daño físico, en muchos casos irreversibles y con consecuencias como la muerte, también producen severos daños psicológicos, al alejar a estas mujeres de sus familias y amigos.
Lo mejor en estos casos es tener atención médica y psicológica urgente, y recibir el apoyo de la familia. Solo así se puede lograr la recuperación. Y sobre todo entender que la belleza esta en el interior de las personas, y no hay nada más bello que una mujer feliz, sana y disfrutando de la vida.