Un cierto número de personas viven condiciones que son dolorosas y consideradas como crónicas. Personas que sufren enfermedades como la artrosis o la poliartritis reumatoide sienten habitualmente una incomodidad combinada a este problema –sienten dolor en las articulaciones, así como inflamación en otras partes del cuerpo, incluido el corazón–.
Estas personas podrían pensar fácilmente que existe una solución disponible para tratar el problema del dolor. Sin embargo, además de la ingesta de analgésicos y anti-inflamatorios, la medicina tradicional no ofrece muchas más ideas. Desde la medicina natural se busca intentar controlar el dolor de forma natural.
Cómo calmar el dolor naturalmente
Los problemas de salud crónicos suelen ser difíciles de controlar, sobre todo en las personas jóvenes. Por desgracia, las personas afectadas deben en algún momento elegir cómo quieren que se trate el problema del dolor. En realidad, hace falta mucha determinación por parte de la persona afectada, pero haciendo un esfuerzo serio, se puede superar el dolor causado por enfermedades crónicas en el cuerpo.
Existen varios métodos que la gente puede elegir e integrar en la vida diaria. La meditación está pensada para ser un buen medio para hacer frente a este tipo de condiciones. Encontrar un lugar tranquilo, una postura del cuerpo en una posición fácilmente accesible y bloqueando los pensamientos que dispersan, es algo que todo el mundo puede adoptar. Los ejercicios de respiración pueden igualmente ayudar a calmar el dolor de manera eficaz.
Es esencial para las personas que sufren algún tipo de enfermedad crónica que se intente reducir el nivel de estrés. Estas personas pueden verse fácilmente agitadas y perder el control sobre el temperamento. El estrés tiene la capacidad de afectar a las condiciones dolorosas y empeorarlas. Una tentativa es, pues, la de permanecer en calma a lo largo de todo el día.
Hábitos saludables
Las afecciones dolorosas pueden causar la pérdida de sueño. Un hábito que suelen tener las personas que tienen dolor crónico es el de beber alcohol pensando que puede ayudar a dormir mejor. Se trata en realidad de una percepción que no es real, ya que el alcohol empeora el problema. Limitar el consumo de alcohol o incluso dejarlo por completo es sin duda la mejor opción.
Evitar el ejercicio suele ser un hábito normal en personas que tienen dolor. Normalmente, estas personas piensan que el dolor crónico se agravará si realizan algún tipo de deporte. En realidad, no se dan cuenta de que el cuerpo libera endorfinas al ejercitarse, lo que puede ciertamente bloquear las señales del dolor que son enviadas al cerebro. Por lo tanto, es muy recomendable la práctica de algún deporte si se padecen dolores crónicos.
Por último, fumar también puede agravar las condiciones del dolor, aparte de los riesgos de hipertensión, enfermedades cardíacas y cáncer que puede provocar. Por consiguiente, el uso del tabaco, sea de la forma que sea, debe evitarse siempre, puesto que lejos de beneficiar al paciente, empeora sus condiciones de vida.
Estas son algunas recomendaciones para convivir con el dolor crónico. Esperamos que te hayan sido útiles y puedas tener una vida más saludable y sin sufrimiento. ¿Conoces algún otro truco natural y efectivo?