En los tiempos que vivimos, es común que nos encontremos siempre con falta de tiempo, sobre todo cuando vivimos en las grandes ciudades, donde generalmente las personas siempre están apuradas, ya sea por el trabajo, por llevar a los hijos al colegio, hacer las compras de la casa, etc. Nuestro cuerpo suele contracturarse y vivimos muchas veces bajo el estrés de la ciudad: para esos momentos siempre es muy bueno y placentero recibir un masaje que nos descontracture y relaje.
1. Mejoran la circulación y el movimiento
Los masajes no sólo se sienten bien: hacen bien, beneficiando a casi todas las partes del cuerpo. Los principales beneficios del masaje son mejorar la circulación y el movimiento.
Los residuos, como el ácido láctico y carbónico, se acumulan en el músculo a través del curso de las actividades cotidianas, y al aumentar el flujo sanguíneo, aumenta la circulación de la linfa por todo el cuerpo, que a su vez realiza la limpieza de estos residuos
Después de una intensa sesión de ejercicios, se ha descubierto que los masajes reducen la inflamación, produciendo un efecto similar a los analgésicos.
2. Mejora el sistema inmunológico
Un estudio realizado en los Estados Unidos encontró que 45 minutos de masaje sueco lleva a un aumento en las bacterias que combaten las células blancas de la sangre, dando lugar a una mejora en todo el sistema inmunológico.
Esto es muy beneficioso, porque al aumentar las defensas, nuestro cuerpo enfrenta con mas eficacia todo tipo de virus y bacterias que se encuentren en el ambiente.
3. Reduce el estrés y la tensión arterial
El estrés puede causar un aumento de la tensión en todo el cuerpo, que puede conducir a la ansiedad y pensamientos poco claros. El masaje ayuda a liberar el estrés y mejorar el equilibrio cuerpo/mente, y como resultado permite una perspectiva más equilibrada en situaciones de estrés.
Los masajes son excelentes para aliviar el estrés y los combatientes de fatiga a través de la liberación de endorfinas. El contacto físico intenso y prolongado del masaje aumenta los niveles de serotonina, una hormona que es clave para la producción de melatonina, la sustancia que modera la etapa del sueño de nuestro ciclo circadiano.
Un masaje de corta duración –15 minutos– es suficiente para frenar un ritmo acelerado del corazón, la tensión arterial y hacer que la hormona del estrés, el cortisol, descienda.
4. Beneficia el sistema respiratorio
Un ligero masaje también puede beneficiar al sistema respiratorio, reduciendo las sustancias que desencadenan las alergias y el asma.
5. Existen varios tipos que se adecuan a tu necesidad
Masaje deportivo
No está diseñado para ser relajante, puede ser muy intenso.
Masaje relajante (también conocido como sueco)
Este tipo de masaje reduce el estrés, mejora la circulación y el movimiento.
Shiatsu
Es una alternativa japonesa que usa la presión de los dedos y la palma, se cree que ayuda a las personas a lidiar con problemas de estrés, náuseas, ansiedad y depresión mediante la corrección de los desequilibrios del cuerpo.
Masaje Linfático
Es un tratamiento que combina una suave presión con movimientos suaves de bombeo en la dirección de los ganglios linfáticos. La estimulación del sistema linfático ayuda en la eliminación y filtrado de los desechos de las células del cuerpo.
Son varios los beneficios para nuestro cuerpo al recibir un masaje. ¿Hace cuanto que no recibes uno? ¿Qué estás esperando?