El tamaño de los poros está determinado, sobre todo, por tus genes y tu tipo de piel –así que ya sabes a quién culpar–. En general, las mujeres de piel seca tienen poros pequeños y las de piel grasa –como tú– poros más grandes. Entonces, la pregunta del millón es: ¿Cómo puedes minimizar tus poros?
#1 Un buen limpiador
A la hora de reducir el tamaño de los poros es fundamental contar con una buena limpieza. Así que incorpora a tu armario un buen limpiador facial –si contiene ácido glicóligo y salicílico, mejor–. Asegúrate de que sea lo suficientemente suave como para que puedas aplicártelo todos los días, 2 veces: por la mañana y por la noche.
#2 Nada de apretarse
¡Ni se te ocurra andar por la vida apretándote los poros! Lo cierto es que este hábito no los hará más pequeños y, además, terminará por dañar tus tejidos. Así que contén tu ansiedad, guarda tus manos en los bolsillos y aprovecha tu tiempo comprando el limpiador facial.
#3 Crema para afinar los poros
En este tratamiento, no puede faltar una crema para afinar poros. Esta es ideal para acelerar la regeneración celular. En otras palabras, esta variedad de cremas estimula que las capas cutáneas nuevas lleguen más rápidamente a la superficie. Esto hace que la piel luzca más fresca y los poros, más reducidos.
#4 El maquillaje adecuado
Si te maquillas todos los días, es importante que lo hagas con los cosméticos adecuados. Así, procura elegir aquellos que sean livianos y contengan mucho aceite. Y, antes de aplicarte la base, colócate una buena capa de prebase en el rostro. Esto impedirá que la base "se hunda" en los poros y los haga parecer más grandes.
#5 Recomendaciones finales
Para que este tratamiento sea efectivo y tú puedas experimentar cambios notables, tendrás que armarte de mucha paciencia y constancia. Las transformaciones cutáneas tardan por lo menos 30 días en manifestarse –esto es lo que tarda la piel en regenerarse por completo–.
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