Cosas que suceden en países como Estados Unidos... Algunos centros especializados en la piel ofrecen un estudio de ADN para determinar cómo envejecerá la piel.
El tipo de piel y la forma que el tiempo actúa sobre ella depende de la predisposición genética de cada persona, y es difícil predecir cómo responderá al envejecimiento.
En Texas se ofrece un estudio dermatológico utilizando la tecnología de ADN para recomendar los tratamientos de cuidado de la piel. La finalidad es ayudar a las personas que invierten su dinero en el cuidado de la piel, pero de una manera más decidida y específica de acuerdo a sus necesidades marcadas por los genes.
Todo está en el ADN
La forma de verificar el ADN es muy sencilla. Sólo pasando un hisopo en la mejilla de la persona, los científicos ya pueden tomar la muestra. Si bien pueden realizar el estudio con células de cualquier parte del cuerpo, las de las mejillas son más fáciles de obtener porque se desprenden más fácilmente.
En el siguiente paso, el laboratorio analiza específicamente las secciones del ADN, denominadas polimorfismos de nucleótido único o SNPS, que son los que te hacen única. Desde estos, se analizan la formación de colágeno, el factor de protección solar, de antioxidante, de glicación, etc.
Es a partir de estos resultados que los especialistas sugieren las opciones de cuidados de la piel y suplementos orales para tratar las necesidades genéticas específicas de cada piel.
No son muchos los médicos que ofrecen este servicio, pero seguramente con el tiempo se volverá más popular. Cuando las personas conozcan su predisposición genética podrán elegir más fácilmente sus productos de belleza en las farmacias.
En vez de guiarte por lo que muestra tu cara como reacción a ciertos productos, con este análisis se puede hacer frente a la raíz del problema, además de prevenir problemas futuros. Es tan sencillo como pensar que la genética brinda una “hoja de ruta”, para guiar hacia el correcto cuidado de la piel según tu ADN.
¿Qué opinas de este novedoso modo del cuidado de la piel? ¿Lo harías? ¡Déjanos tu opinión en un comentario en iMujer!