La recámara no es simplemente el lugar dónde dormimos, sino que es nuestro paraíso de descanso dónde disfrutamos del relax, y por qué no, nuestro espacio meditativo. Decorar una recámara lleva sus trucos, sobretodo dependiendo del tipo de recámara. Para hacerte la tarea más fácil, vamos a darte unos tips para decorar una recámara según su fin.
Es importante crear un ambiente familiar, decorarlo con fotografías, un televisor, sonido y todo lo necesario para hacer de él un lugar de confort. Si la habitación es pequeña, trata de pintarlo con colores tenues para hacerlo ver más grande. Y darle una gran iluminación es muy importante. Haz que los almohadones convienen con tus cortinas para crear un espacio de armonía.
En el caso de las recámaras para niños trata de escoger colores neutros, ya que los niños pasan por muchas etapas y si decides decorar sobre un personaje en particular, ten en cuenta que ¡durará poco tiempo!, en cambio, si escoges muebles neutros y no estrictamente infantiles estarás haciendo que duren más. Consigue muebles amplios, que sean ideales para guardar juguetes, podrás juntarlos todos en forma simple y mantener la prolijidad de los lugares.
Si quieres cambiar el piso, trata de poner alfombras y muchos almohadones, los niños aman el piso, y así no tendrás que gastar demasiado en sillones y podrás lavarlo con facilidad.
Las recámaras para adolescentes tienden a ser más íntimas y requieren de un espacio dónde reunirse con amigos. Trata de pintarlo de su color favorito. Una opción interesante es ir a un mercado de pulgas y encontrar mobiliario que se adapte a su gusto, incluso pueden restaurar los muebles en conjunto para realizar una decoración a la medida justa. Los puffs y almohadones son accesorios que vienen muy bien y no son nada costosos.
Esperamos que con estos tips puedas abrir el gran abanico de la decoración y puedas realizar una maravillosa decoración útil para tus ambientes.