Cuando hablamos de este tipo de parásitos, lo primero que pensamos es que arrancar las garrapatas del pelo de nuestro perro es la mejor opción para combatirlas. Sin embargo es el principal error y el más frecuente. ¿Lo sabías?
Las garrapatas son molestas para tu mascota y pueden serlo para tu familia y el hogar. ¿La primer regla? Mantener la casa limpia y en orden.
Hay mucho por aprender sobre el cuidado de tu perro. Tené en cuenta estos tips para combatir las garrapatas y ayudarlo a vivir más sano y feliz.
Qué hago si encuentro garrapatas
Esta pregunta es clave. Como te contamos, arrancarlas de cuajo no es la solución. Lo único que se logra con esto es quitarlas sólo de una parte del cuerpo, quedando todavía el resto del parásito adherido al perro, lo que puede provocarle infecciones.
Tampoco es correcto intentar soluciones caseras como quemar el cuerpo de la garrapata con un fósforo o aplicarle kerosene o algún otro producto tóxico. ¡Ni lo intentes!
Un dato clave: la sangre que contiene la garrapata puede transmitir enfermedades contagiosas al hombre por lo que, antes de manipularla, es necesario que te protejas las manos con guantes de goma y uses una pinza.
Cómo combatirlas
Lo ideal es primero aplicar un antiparasitario en spray a tu perro. Se debe pulverizar el spray sobre el conjunto del cuerpo, sin olvidar las orejas ni los pliegues, que es donde se alojan las garrapatas. Una vez aplicado el producto, hay que esperar unos minutos y luego intentar retirarlas colocando una pinza lo más cerca posible de la unión del parásito con la piel de la mascota.
Algunas pueden quedar enganchadas en el pelo y deben ser retiradas manualmente. Para aplicar el producto en la cabeza, podés verter un poco en el hueco de la mano (con guantes) y luego aplicarlo en la cara friccionando suavemente. De esta manera, evitás que se dañen los ojos de tu perro.
Una vez despegada la garrapata, hay que ponerla en un recipiente con alcohol para matar al parásito y destruir sus huevos. Así evitarás futuras lesiones.
Recordá que no es bueno aplastarla o pisarla, tampoco tirarla directamente en la basura del hogar o en el inodoro porque de esa manera el parásito continúa vivo y puede seguir reproduciéndose.
Por otro lado, es conveniente desinfectar la lesión que dejó el aparato bucal del parásito en la piel de la mascota ya que puede ser puerta de entrada para infecciones bacterianas e incluso para que ciertas moscas pongan sus huevos allí, más durante el verano.
Tené en cuenta que por lo general los productos no dañan el pelo de tu mascota y pueden evitarle muchas lesiones. Seguí estos consejos y cuidá a tu perro como se lo merece.
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