El tejido es una de las manualidades más bellas que una persona puede aprender, o al menos eso es lo que yo pienso. Desde el primer día en que tomé las agujas y el hilo, me enamoré de los tejidos.
Si sientes fascinación por esta técnica, probablemente te estés preguntando cómo aprender a tejer, por lo que hoy te daré algunas recomendaciones, llegadas directamente desde mi experiencia personal.
No sucede en todas las casas, pero en mi familia, las manualidades son una suerte de herencia, ya que prácticamente todos sabemos hacer algún tipo de manualidad. Yo crecí viendo como mis tías, mis abuelas, mi madre y hasta mi madrina tejían, así que era sólo cuestión de tiempo el que yo comenzara a hacerlo.
Para aprender a tejer, siempre es bueno tener a tu lado a alguien que sepa tejer, porque es más sencillo comprender los pasos si puedes consultar y ver exactamente como son.
Si conoces a alguien que sepa tejer, no dudes en pedirle algunas lecciones. Pero si no conoces a alguien que sepa hacerlo, puedes buscar cursos que te ayuden. Nada supera el tener a tu lado a alguien que te enseñe a tejer.
Al comenzar a tejer, creo que lo mejor es hacerlo con agujas y lana gruesa, porque se te hará más fácil ver los puntos y trabajarás con mayor comodidad. Así sea que aprendas a tejer con dos agujas o en croché (ganchillo), lo mejor es trabajar con agujas y lana gruesa.
Te recomiendo que visites una tienda de lanas e hilos, que te dejes maravillar por los colores y texturas y elijas una lana o hilo que te guste. Luego compra las agujas correspondientes y comienza a practicar.
Por más que en el comienzo te cueste y veas que el tejido es una maraña de hilos torcidos y sin mucha forma, no pares, sigue intentando. Y nunca temas desarmar el trabajo y volver a comenzar.
El tejido es una excelente manualidad, y verás que con la práctica podrás crear cosas maravillosas con tus propias manos, y ya no querrás parar. Una vez que veas cómo aprender a tejer es útil, será parte de tu vida.