Ingresar al mundo de la jardinería sin ningún tipo de experiencia puede ser una tarea peligrosa. Desconocer las técnicas y secretitos que aseguran el éxito puede dejarnos con un sabor amargo de esfuerzos inútiles e ilusiones quebradas. Para que no te suceda, y tu vivencia en el jardín sea a prueba de errores, no dejes de visitarnos. Hoy te enseñamos como sembrar un árbol en 10 sencillos pasos.
Materiales que necesitarás
- Un árbol para plantar
- Pala cuadrada
- Pala redonda
- Rastrillo
- Manguera
- Tijeras o cuchillo (opcional)
- Mulch
Encuentra un sitio para el árbol
Observa cuidadosamente tu jardín, y escoge un lindo lugar para recibir a tu nuevo árbol. Recuerda que debe tener suficiente espacio alrededor para crecer sin problemas, así que mantelo prudentemente alejado de tu casa.
Selecciona un árbol
Considera las condiciones físicas de tu jardín. El espacio, el sol y la sombra, el tipo de suelo, el clima, etc. Puedes consultar en tu centro de jardinería local para guiarte. ¿Qué tal si eliges un árbol de frutos delicioso, como el Satsuma? Da click aquí y aprende más de este ejemplar.
Prepara el terreno
Toma la manguera y utilízala para marcar sobre el suelo el lugar donde plantarás el árbol. Recuerda, debe ser el doble de grande que el cepellón, mínimamente. Luego, trasplanta las flores o plantas que puedan existir en la posición elegida, y de ser preciso, ayúdate con una pala o cortador de césped para quitar este también. Finalmente, usa un rastrillo para eliminar terrones de suelo.
Riega las raíces o el cepellón
Si tienes raíces secas antes de sembrar un árbol, lo único que obtendrás son raíces muertes luego de plantar. Asegúrate de proporcionarles agua suficiente para garantizarles una vida sana.
Cava el agujero
Éste no debe ser demasiado profundo. Es suficiente con que dos tercios de las raíces se encuentren bajo el suelo.
Afloja el subsuelo
Tomar una pala y afloja el suelo de las paredes del hoyo que cavaste. Esto permitirá que las raíces se puedan mover más fácilmente al crecer.
Coloca el árbol en el hoyo
Llegó el momento. Sin ningún tipo de revestimiento, ingresa las raíces en el hoyo. Cuida que se encuentre bien centrado y totalmente vertical. Rellena el agujero lo suficientemente bien para evitar que este se incline.
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Riega el árbol
Desde ahora la consigna será regar. Ajusta tu manguera de jardín en un goteo lento y riega todo el contorno de la raíz.
Añade mulch
Luego de plantar exitosamente tu árbol, puedes añadir una capa de tres pulgadas de mulch a su alrededor. Esto conservará la humedad.
Comprueba regularmente el árbol
Debes tener presente que en este punto se inicia la tarea más ardua. Riégalo con cuidado y regularmente, y no olvides podar cuando sea necesario.
Pon en práctica estos sencillos pasos y cuéntanos tu experiencia en el mundo de la jardinería.