
¿Quieres ofrecer una cena especial esta noche? Pues te animo a preparar este delicioso plato que se sale de lo común: pollo a la francesa. La receta es sencilla y la clave para que resulte tan sabrosa reside en cocer las pechugas fritas en una salsa a base de limón, vino y caldo de ave.
No llevará mucho tiempo y podrás brindarle a tu familia un aroma exquisito y la delicia de la buena cocina. Sigue mis pasos.
Ingredientes:
- 4 pechugas de pollo, deshuesadas y sin piel
- ½ taza de harina
- ¾ cucharada de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- 2 huevos grandes batidos
- ½ taza de caldo de ave
- ½ cucharada de vino blanco
- ½ libra de mantequilla
- Jugo de 2 limones
- 1 limón, cortado en rodajas
- Puñado de perejil fresco
Preparación:
Coloca las pechugas en una tabla de cortar y envuélvelas en plástico. Con un mazo golpéalas hasta reducir su grosor a 6 milímetros.
En un recipiente coloca la harina, la sal y la pimienta. Hunde allí cada una de las pechugas de modo que se impregne bien por cada cara. Luego pásalas por el huevo batido y un poco más por la harina.
Pon el aceite de oliva en un caldero y deja calentar a fuego moderado. Cuando esté caliente, fríe las pechugas 2 minutos por cada cara. Retira hacia un plato cuando estén doradas.
Agrega ahora las rodajas de limón a la caldera y saltea durante 1 o 2 minutos. Añade el vino, el caldo de ave y el jugo de limón. Deja que hierva por 5 minutos.
Incorpora la mantequilla y una pizca de harina, revuelve para disolver esta última. Reduce la temperatura a fuego bajo y coloca las pechugas en la salsa. Deja que se cocine durante 2 minutos. Rectifica la sal.
Sirve en una bandeja y rocía con el perejil fresco, lo que le conferirá una fragancia excepcional.
Pollo a la francesa: una receta exquisita que moverá el placer de los paladares del hogar. ¡Muy buen provecho!