¿Alguna vez pensaste que tus jefes eran fáciles de engañar? O, mejor dicho, ¿pensaste que ellos están demasiado ocupados como para advertir algunos detalles? Si es así, es hora de que te enteres de que ellos te observan más de lo que tú crees. El problema es que hay ciertas cosas que un jefe nota pero jamás diría.
Hay un segundo problema, y es que si no prestas atención y cuidas ciertos comportamientos y actitudes no muy apropiadas para el ámbito laboral, te enterarás a través de una carta de despido, enviada por el departamente de Recursos Humanos, de que, en realidad, tu jefe sí se daba cuenta de todo. ¡Y seguramente no quieres llegar a esa instancia!
Por eso, presta atención a las siguientes cosas que tu jefe sabe pero jamás te diría, para que puedas ser más cuidadosa de aquí en adelante.
Pasas demasiado tiempo en Facebook
Tanto ésa como otras redes sociales están tan incorporadas a la vida cotidiana de las personas que éstas no advierten lo mucho que pueden afectar su productividad. Tu jefe está convencido de que este tipo de distracciones reducen tu rendimiento. Aunque no lo adviertas, los directivos ya están al tanto de la fuerte presencia de las redes sociales en las horas de oficina, y es por eso que están más alertas que nunca.
Hablas mucho en las reuniones
Si hay algo que los jefes advierten fácilmente es a un empleado que habla mucho. Está bueno que expreses tus ideas en las reuniones, pero cuida que tus intervenciones sean apropiadas y necesarias.
Eres demasiado pasional
Ya sea por enojo, tristeza, alegría o exaltación, las reacciones emocionales extremas no son bienvenidas. Probablemente, tu jefe te recordará por los episodios que generas con tus actitudes de desenfreno emocional más que por tu buen desempeño. De hecho, tu jefe tenderá a pensar que esta especie de inestabilidad emocional afecta tu redimiento. ¡Cuidado!
Cosas que tu jefe advierte, pero jamás te diría1.jpg
Tu vestimenta es inapropiada
El uso de vestimenta inapropiada es más común en el género femenino, simplemente porque los hombres no tenemos muchas opciones a la hora de elegir qué ponerse para ir a trabajar. Y lo cierto es que raramente un superior se acercará a decirte que "el escote de tu camiseta es demasiado grande" o que "tu falda es por demás corta", y, sin embargo, ¡lo advierten!
Detalles como éste harán que tus jefes no te tomen tan en serio y, a la hora de escoger representantes para algún congreso, por ejemplo, tal vez prefieran dejarte de lado por temor a que tu imagen no sea lo suficientemente profesional.
Mezclas tu vida personal con la laboral
Si llevas a tus hijos a la oficina constantemente o pasas mucho tiempo contándole a tus compañeros acerca de tus peleas maritales, eso se nota y hasta puede incomodar. Primero lo notarán tus compañeros; luego, llegará a oídos de tu jefe, que a partir de ese momento estará alerta y advertirá cada uno de esos movimientos tuyos algo inadecuados.
Ocultas información
Tal vez, tú pensaste que tu jefe nunca lo notaría o que no le daría mucha importancia al asunto. Sin embargo, no es así. Entérate de que a un jefe le gusta estar al tanto de absolutamente todo. Por más insignificantes que sean los detalles que decidiste no compartir con él, no lo considerará un buen gesto. Si llevas adelante un proyecto, asegúrate de que sepa los buenos y los malos aspectos de éste. En "las malas", tanto como en "las buenas", la honestidad es premiada con la confianza.
Así que, ya lo sabes: los jefes están más alerta de lo que tú crees y ven más de lo que callan. Adelántate a sus opiniones, y bríndales la imagen que quieren ver.