Depresión en los bebés: cómo detectarla
Los bebés llegan al mundo y están en busca de un vínculo positivo con la gente que lo rodea, especialmente con la madre, que es la persona que le otorga el vínculo más estrecho y le asegura la protección, el cuidado y el cariño. Pero cuando este vínculo no se crea de ese modo, el bebé siente la falta de apoyo y puede presentar cuadros depresivos. No es muy frecuente, pero existen casos de bebés con depresión, la cual se genera, la mayoría de las veces, a causa de la depresión posparto de la madre.
Es muy difícil de detectar si un bebé está en ese estado o no, ya que cuando es tan chico no es fácil saber lo que siente. Sin embargo, hay síntomas que pueden ayudar a que los padres se den cuenta si su hijo está con depresión o no. Una de las cosas más comunes es que el bebé esté apático y sin ganas de hacer ninguna actividad. También sucede que el niño no busque llamar la atención, algo que es extraño en los bebés ya que a esa edad siempre quieren captar al atención de todo el mundo.
Otro síntoma es que no rechace los brazos de personas desconocidas, cuando en general, los niños se ponen muy mal si los separan de los brazos de su madre. El estado de depresión causa consecuencias inmediatas como ser retraso en el aprendizaje, en el habla, problemas para dormir, somatizaciones del tipo enfermedades porque sus defensas bajan y más. En estos casos la consulta con un especialista es fundamental y no se puede perder tiempo, ya que cada día que pasa es clave, porque la situación puede empeorar y agravarse.
Es necesario que la madre también recurra a un especialista si está ella con depresión, para no transmitirle más angustia a su hijo, y poder reforzar su amor hacia él, para que el niño capte eso y se tranquilice y vuelva a sentirse bien. Son momentos difíciles, y no se arregla de un día para el otro, pero hay que tener fe en que todo va a mejorar en algún momento.
Vía | saludactual