El Oculus Rift es un casco de realidad virtual para videojuegos, por el que se acaba de realizar una inversión significativa de más de 54 millones de euros por parte de Andreessen Horowitz, uno de los fondos de inversión más prestigiosos de Silicon Valley.
Inversión millonaria para Oculus Rift
"Estamos impacientes por ayudarles a cambiar el mundo", dice Marc Andreessen. Creador del navegador Internet Netscape en 1990, ya ha financiado a firmas como Twitter, Foursquare, Facebook y Airbnb.
El Oculus Rift se parece a un sueño de niños. El casco contiene una pantalla que una vez posicionada delante de los ojos, introduce al espectador en una visión de tres dimensiones. Gracias a una serie de sensores, los desplazamientos de la imagen a 110 grados coinciden con los movimientos de la cabeza.
El Oculus Rift da la impresión de caminar en un universo virtual, contrariamente a los cascos de proyección que ya se venden en el mercado. El efecto es impresionante, e increíblemente realista.
40.000 unidades de prueba
Este proyecto fue lanzado a finales de año pasado gracias al sitio de financiación participativa Kickstarter. Los internautas consiguieron reunir en pocos días 1,75 millones de euros, cerca de diez veces la cantidad esperada por los creadores del accesorio. Desde entonces, el Oculus Rift se ha llevado muchos premios a nivel internacional.
John Carmack, fundador de los videojuegos Doom, Wolfenstein 3D y Quake, ha dejado id Software para convertirse en responsable técnico de esto nuevo proyecto.
En su primera versión, el Oculus Rift tendrá que ir conectado a un PC o a un smartphone Android, que ejecutará los juegos proyectados sobre la pantalla del casco. El accesorio tendrá que estar acoplado igualmente a un mando de juego tradicional, para desplazarse en el universo en tres dimensiones.
Cerca de 40.000 ejemplares de prueba han sido enviados a creadores de juegos y apasionados de la tecnología. La versión final de Oculus Rift, para la que todavía no hay fecha de lanzamiento, será miniaturizada e irá equipada con una pantalla de alta definición.
El futuro de la realidad virtual
Las primeras aplicaciones estarán enfocadas a los videojuegos, con nuevas interfaces para reinventar el sector. Desde los años 1990, Nintendo hizo un intento en esto con su casco Virtual Boy, pero la tecnología no estaba a la altura.
Marc Adreessen quiere ir más lejos. Para él, "el Oculus tan sólo está en sus comienzos. También va de cambiar la experiencia en el campo de las películas, la educación, la arquitectura y el diseño".
En definitiva, estamos hablando de una pequeña revolución en el mundo de los videojuegos. Tan sólo nos queda tener paciencia para poder tener en nuestras manos, o mejor dicho sobre nuestras cabezas, una tecnología que seguro entusiasmará a más de un apasionado por este tipo de aparatos.