Miles de migrantes centroamericanos viven su 'Vía Crucis' personal cuando pasan por México, camino a El Norte, la Tierra Prometida. Pero en vez de llegar a la tierra donde fluye la miel y la leche, la mayoría de los peregrinos que huyen de la pobreza, la explotación y la injusticia solo encuentran más sufrimiento en el país más acosado por el narcotráfico y la violencia. Y también hallan la muerte.