¿Necesitas saber el santoral de hoy miércoles 12 de noviembre de 2025?

Este es el santo que se conmemora en este día. Comprueba a quién debes felicitar.

Video Un bebé hispano de 6 meses sobrevive de "milagro" a un deslave: sus padres murieron en la tragedia

En este 12 de noviembre, recordamos a San Josafat, mártir (1580-1623), un ferviente defensor de la unión de su pueblo con Roma, cuya vida estuvo marcada por la dedicación, la oración y un sacrificio supremo en su misión de restaurar la fe católica en tiempos de cisma y persecución.

La vida y obra de San Josafat, mártir (1580-1623)

PUBLICIDAD

San Josafat, nacido en 1580 en Vlodimir, Volinia, fue un destacado religioso de la época del Cisma de Oriente. Proveniente de una familia noble, se bautizó en la Iglesia bizantina separada de Roma. A los 15 años, tras la unión de los rutenos con Roma, comenzó su camino hacia la fe católica, lo que lo llevó a ingresar al monasterio de San Basilio, donde adoptó el nombre de Josafat. Su vida estuvo marcada por un ferviente deseo de unir a su pueblo con Roma, dedicándose a la oración y la mortificación.

Como sacerdote, San Josafat se ganó el apodo de "el azote de los herejes" por su celo en la defensa de la fe católica. Su ministerio se extendió por varias poblaciones, donde revitalizó monasterios y buscó vocaciones. En 1614, fue nombrado archimandrita de la Santísima Trinidad en Vilna y, posteriormente, arzobispo de Polotsk. A pesar de las adversidades y la oposición de los disidentes, su vida de austeridad y dedicación pastoral lo convirtió en un referente espiritual, llevando a muchos a abrazar la unión con Roma.

Relación con Jesús y legado espiritual

El compromiso de San Josafat con su fe lo llevó a ser un testigo de la lucha entre la verdad y la herejía. Su vida estuvo marcada por la oración, la humildad y la caridad, valores que reflejaban su profundo vínculo con Jesús. Enfrentó la oposición con valentía, utilizando la oración y la pastoral como sus principales armas. Su trágica muerte, en un ataque orquestado por disidentes, fue un sacrificio que resonó en su comunidad, simbolizando su entrega total al servicio de Dios y su pueblo. En su ministerio, la oración, la humildad y la caridad fueron sus principales armas.

PUBLICIDAD

El legado de San Josafat perdura en la historia de la Iglesia católica oriental unida a Roma. Su vida y martirio inspiraron a muchos a seguir su ejemplo de fe y dedicación. La conversión de su rival, Melecio, años después, es un testimonio del impacto que tuvo su labor en la promoción de la unidad cristiana. Su memoria sigue siendo un faro de esperanza para aquellos que buscan la reconciliación y la unión en la fe.

Todos los santos que celebramos este miércoles

Josafat, Aurelio, Publio, Millán, Adalberto, Arsacio, Teódulo, Nilo el Sinaíta, Benedicto, Juan, Mateo, Cristino, Renato, Cuniberto, Esiquio, Rufo, Livino, Leodegario, Margarito Flores García, Cumián, Paterno.

Oración al santo del día

Glorioso(a) San(ta): a ti acudimos, llenos de confianza en tu intercesión. Nos sentimos atraídos a ti con una especial devoción y sabemos que nuestras súplicas serán más agradables a Dios nuestro Señor, si tu, que tan amado(a) eres de Él, se las presentáis. Tu caridad, reflejo admirable de la de Dios, te inclina a socorrer toda miseria, a consolar toda pena y a complacer todo deseo y necesidad, si ello ha de ser en provecho de nuestra alma. Mira, pues, nuestras miserias y penas nuestros trabajos y necesidades, nuestros buenos deseos y alcánzanos que cada día aseguremos más nuestra eterna salvación con la práctica de las buenas obras y la imitación de tus virtudes.

Este contenido ha sido generado con inteligencia artificial y supervisado por el equipo de Univisión.