Quienes distribuyen fentanilo podrían enfrentar cargos de asesinato en Arizona por muertes por sobredosis
PHOENIX, Arizona – Un proyecto de ley que se está debatiendo en Arizona contempla que quienes distribuyan o vendan pastillas de fentanilo a alguien que termine muriendo por una sobredosis, podrían enfrentar cargos de delitos graves de asesinato en primer grado, que se castigan con la muerte.
Se trata del proyecto de ley 1029, uno que analizan los legisladores en un intento de combatir la crisis de opioides en el estado, que enmarca la llamada epidemia de fentanilo.
Las sanciones aplican no solo a traficantes de drogas, sino también a amigos o a cualquier persona que, a sabiendas, le proporcione el opioide a alguien más.
Este proyecto se escuchó en el Comité Judicial del Senado, y se aprobó por cuatro votos (republicanos) contra tres demócratas que votaron en contra.
Según el senador estatal republicano Anthony Kern (Glendale), quien lo presentó, la dura sentencia busca disuadir el uso del fentanilo.
“Ese es un delito grave de clase 1 sujeto a la pena de muerte, cadena perpetua”, añadió Kern.
El Departamento de Servicios de Salud de Arizona contabiliza más de 1,500 decesos el año pasado por sobredosis relacionadas con opioides; en lo que va de este año se tiene registro de 13 muertes sospechosas de tener relación con estas drogas.
Del otro lado de la moneda, los detractores del proyecto, como la senadora estatal demócrata Alma Hernández, consideran que es problemático, que no ayudará a reducir las sobredosis por fentanilo, y que criminaliza todavía más a las personas adictas.
Este bando indica que, contrario a lo que pueden pensar quienes han perdido a un ser querido a causa de estas drogas, el proyecto no criminalizaría a los grandes traficantes, sino a adictos que terminan compartiendo sus drogas con otros adictos.