La doctora en psicología Christina Balinotti explica que las personas con tendencia a cometer conductas de violencia o crimen por lo general son reservadas, tímidas, padecen de trastornos explosivos, no se expresan mucho, e “intentan bloquear la ira, pero al final explotan”. Dice que son conductas que se forjan desde la niñez y que pueden haber sido criados por padres violentos.